Después de deprimirme con Lanata y tener ganas de irme a la mierda, apareció en pantalla la exótica cara de Iván de Pineda con su pésima dicción, pero encantador desparpajo de todo pendejo, paseando por Mykonos.
Entonces decidí que quiero, ser Iván de Pineda en versión femenina, y que me paguen por viajar. Si eso es laburo, quiero laburar de lunes a lunes, de enero a diciembre, de 0 a 24 hs. Eso sí, siguiendo al verano, porque en invierno se me da por hibernar.
En lo posible tener la edad del muchacho, la altura del quía, y su facilidad de manejar varios idiomas.
Estoy intentando aprender a decir, mozo, sin sal por favor ,en italiano, francés, alemán, checo, austríaco, inglés y griego.
Quiero un par de piernas que acompañen esa sabiduría lingüística, porque para ir a comer voy a tener que caminar. Seamos razonables, quizás lo del viaje se me da, pero lo de la edad lo veo poco posible. Debería primero tener un contacto directo con Dorian Gray. Si alguien tiene llegada inmediata, que se comunique conmigo a panicoaenvejecer@elaverno.com.ar
Quiero dos pasajes en primera clase, uno para mí y otro para mi otro yo, con destino a Garching, que aunque les parezca mentira, existe. Ahí a lo mejor consigo lo que tanto ando buscando. Uno que sepa coser, que sepa bordar y que sepa alguna que otra cosa más. Como cocinar por ejemplo, porque lo que ofrecen en Garching, con dos veces por semana, a esta altura, nos damos por satisfechas. Se entiende, un día yo, y el otro mi otro yo. Los ménage à trois no me gustan. Además no sea cosa que me malacostumbre con tanta atención. Si me malacostumbra George Clooney le damos una patada en el tujes a mi otro yo, y nos dejamos de esas pavadas de serle fiel a una misma. Mi otro yo, es un ser totalmente independiente y no vamos a andar compartiendo al señor con alguien que ni siquiera me da bola ni me cae bien.
Quiero no parecer cuerda, porque no tiene gracia la cordura. Para cuerdos el mundo está lleno, y así nos va.
Quiero ser la feliz poseedora de la llave del cofre de la felicidad, aunque nunca entendí cómo la felicidad cabía en un cofre y te llevaba en micro a Bariloche. Si eso es la felicidad, por favor, castíguenme, y mándenme a Alcatraz, o a la Isla Maciel si el presupuesto no da.
Quiero ser la Reina del Salame Quintero, porque con la cantidad de grasa acumulada en mi cuerpo y cerebro, dudo mucho que llegue a otra cosa.
Quiero ser quien soy, siendo yo misma acompañada por mis múltiples personalidades. Quiero mi esquizofrenia intacta, porque es lo que hace que cuando me aburro, tenga con quién hablar.
Blog dedicado a mí misma que siempre tiene que ver con lo que quiero. Más bien, con lo que quiero y no quiero. A veces quiero todo, otras no quiero nada y la mayoría de las veces no sé lo que quiero. Antes lo quería a George Clooney pero ya no. Encontrarás un apartado "viajes por el mundo para somosolos", en donde jamás ubicarás los mejores restaurantes, bares o monumentos históricos, debido a nuestra falta de orientación.Bienvenidos a la realidad paralela de Soysola y sus otros yos.