martes, 25 de julio de 2023

Hasta siempre Juramento

 No tengo idea de por dónde empezar. 
Digo, por dónde se empieza a embalar y por dónde comenzar a despedirme de Juramento.
Veintinueve años metidos en cajas y envueltos en nylon. 
Toda mi vida pasa por delante de mis ojos mientras miro el living desmantelado.
Veintiocho años tenía la primera noche que dormí en en este departamento , llena de miedos, divorciada hacía muy poco, con ataques de pánico y llamadas a mi ex, llorando, a las tres de la mañana…
Muchos pueden decir que han pasado conmigo toda esa época, pero la verdad es que nadie, sabe ni sabía lo que pasaba, y a veces pasa, cuando se cerraba la puerta del 5ºA.
El miedo, la soledad, la incertidumbre, la oscuridad, la depresión, el pánico, los fantasmas…El infinito mundo de la noche.
Con los años vinieron las ilusiones y las desilusiones. La célebre frase, si las paredes hablaran, aplica al caso. Aunque en este, tendríamos que ponerles bozal legal, o el código de confidencialidad. 
Juramento ha visto todo. Novios oficiales, no oficiales, amantes esporádicos y también amantes estables. Ferias de ropa, amigas de joda, sobrinas necesitadas de alojamiento temporario. Amigos de sobrinas necesitados de alojamiento temporario, primas en la misma situación y me ha visto a mí irme y volver.
Ha pasado de ser un departamento de tres ambientes chico, a un cómodo y enorme dos ambientes con baño en suite y vestidor. Lo que se dice un upgrade.
Lo he odiado y lo he amado. Quince de los veintinueve queriendo mudarme, y ahora que llegó el momento, la tristeza se apodera de mí y me da pena irme. Es como abandonar un ser querido.
Aquí he sido todo. Desde la más miserable hasta la más feliz.
Juramento es Eli, la tía, la amiga, la amante, la esposa, la diosa y el demonio.
Juramento soy yo.